Diario IDEAL, 24 agosto 2011

Es un buen comienzo. Miro el teclado hoy. La pantalla me habla. Coloco el traductor sonoro. Los sonidos saltan rápido. Es una metralleta digital. Comienzo la cuenta atrás. Copio, corto, pego, edito.

El recuerdo es ayer. La apuesta está lista. Y empezamos a escribir. Yo vine porque quise. Su saldo es insuficiente. Te quiero como amigo. Antes te quedaba mejor. Me voy a correr. Nunca digas nunca jamás. Pero ¿tú estás casado? Me gusta tu madre. Por ahí no es. Lo que te perdiste. Sí, la tienes pequeña. Se acabó el verano. Ya no te quiero. Tengo miedo de perderte. Me duele la cabeza. Los políticos están drogados. No te enamores mucho. Es en otra ventanilla. No es tan grande. ¿Te pinto unos patitos? Tu huelen las sobaqueras. ¿No te has depilado? Mi cuerpo pide tierra. Lo nuestro es imposible. No quedan Happy Meal. Yo soy tu padre. Ya no te sigo. Que no veo¡coño! 30 años de hipoteca. Siempre negativos, nunca positivos. Mamá quiero ser periodista. Se terminó la cerveza. Mis padres quieren conocerte. No es tu hijo. Te huelen los pies. Ese tanga es pequeño. No te doy bola. Terminó el finde largo. Tengo un herpes labial. Sin señal wi-fi. Me tienes muy confundida. Nena, parecías más alta. No sé qué quiero. La guagua salió hoy. Lo importante es participar. Han subido los precios. Se acabó el confort. Ya te llamo yo. Lo que te perdiste. Primo ¿tienes un cigarro? Yo sólo fumo maría. María hija, sube ya. El aforo está completo. Me martillé el dedo. ¿Ya está dentro cariño? La abuela fuma porros. Cariño, tenemos que hablar. No, solo somos amigo. No es lo que parece. Cuando yo estudiaba, aprobaba. Creo que me cago. ¿Por que te vas? Me traes la cuenta.

Twitter is over capacity.

PD: Como habrás podido comprobar querido lectos esta semana he participado en un juego en Twitter. Es tan sencillo. Hemos isdo capaces de crear una mega historia alrededor de un hashtag que ha llegado a ser el más famoso durante el fin de semana pasado: #4PalabrasQueDuelen.

He aprovechado esta columna para, en realidad, crear cientos de historias que caben en sólo cuatro palabras. Habría sido capaz de rellenar toda una columna. Pero he preferido que, con este prefacio, puedas inventarte tú las tuyas. Seguro que casi sin pensar, te salen.

Por eso sigo defiendo la grandeza de nuestro idioma generador de grandes historias y leyendas, resumidas sólo es esas 4 palabras que duelen al que las dice, las escucha o simplemente las lee. Y Twitter es hoy ese gran contador de historias, de minis historias, que con permiso de sus cientos de autores anónimos hoy me he permitido brindarte en este esquina de papel.

No te creas nada. Todo es mentira inventada. La información es poder. Hoy me siento poderoso. Tengo y devoro información.

Pero como no todo cabe en cuatro palabras, aquí estoy porque he venido, como he venido me voy; si no te gusta mi canto, como he venido, me voy.

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Dedicado con cariño a @miotraella y @uxueetxebeste

En teoría es el 7º mini relato del verano, y digo en teoría, porque en éste hay cientos de minis…

*Foto by Beatrice Neumman