Diez

Sonmis renglones torcidos:

nosupero la decena por más que encuaderno

misestrofas dedicadas a poetas ascetas,

pormás que intento hilar las bobinas

depalabras y coserlas sin guía

alas rayas de este inerte papel con fondo paciente

ypostura indecente -no lo consigo- ¡levanta papel!

¡novaya a ser que hasta el blanco te haya de ver!

Llegóel final y no superé los diez:

diezrenglones, diez mandamientos, diez tormentas.