Creo que ya he tenido ocasión de celebrar los 40 o más años de muchas de las divinas mujeres que se mueven por el Mundo, conocidas y desconocidas. Hoy he leído por casualidad (Celeste dice que en mi vida nada es casual) una de Pam… con 40 y por eso rememorando a las cantidad de "ellas" que conozco con esa "bendita edad"… y dejo aquí, mi siempre, humilde, homenaje.

Ellas a los 40 o desde los 40 entran en esa edad maravillosa en la que se han despojado de todo ese halo protector que da el género femenino y entran en un mundo sin complejos en el que se mira a los ojos del que se tiene enfrente y se toman las decisiones sin pensar en viejos y manidos estilos de vida.

Ellas, siempre espectacularmente maduras a partir de esta edad, controlan hasta el último de sus músculos en busca de lo que quieren… seguras, decididas, experimentadas, no les tiembla el pulso para seccionar la yugular de la realidad eliminando de un plumazo las cadenas de muchos fantasmas que hace tiempo que dejaron de verse las parte ovípara de su cuerpo porque a ellas se les tiene aseguradas.

¡Craso error!

¡Vivan los 40!