Cuaderno de bitácora: día 33

El día está tranquilo. Sería mejor usar la palabra jornada, pero nos resulta más fácil a tod la tripulación seguir usando las referencias de Verde. Día, tarde, mañana, noche… jerga que aquí arriba no sirve de nada. Nos nos hemos desviado de la ruta y caminos… navegamos, rumbo seguro de regreso a Verde. Aún es pronto para emocionarse, pero el final de esta misión, antes que después, llegará.

De todas formas no sé ni imagino qué será de estos tripulantes una vez regresen. La realidad tras estos miles de unidades de distancia o trigésimas unidades de tiempo, será bien distinta a la que nosotros nos dejamos.

Sin embargo, en el último sueño algo he ocupado mi mente estas últimas fracciones de tiempo. Cierto es que el tiempo que destino a escribir esta diario es irrelevante, infinitesimal si lo comparo con el tiempo en que tarde en crearse un a estrella, desaparecer una costelación o la generación de un nuevo agujero negro. El tiempo, aquí, no existe. Es una referencia esclética.