Daily addiction

Al levantarme siento esas náuseas que te recorren cuando estás sometido a una dependencia que tira de tus entrañas hacia el exterior. En esos instantes, deseas volverte del revés, sacarlas definitivamente y casi a modo de yogui, lavarlas en el Ganges de tu cuarto de baño.

Y sin embargo, no lo puedo evitar. Esa fijación enfermiza se come muchos segundos de mi vida, en forma de tara insuperable. En mi cerebro está ese surco de disco de vinilo que tiene un piquete en su corte segundo que impide que la fina aguja siga su camino… trac- trac- trac- trac…

Y necesito mi chute, mi viaje, mi jaco, mi mierda, mi raya, mi filete, mi tripi, mi cristal…

Aún con las sábanas calientes, me dirijo al teclado y pulso intro. Allí está ella. Mi daily addiction.