Por activa y por pasiva

Diario IDEAL ,19 enero 2011

Ando despistado. Por activa y por pasiva. Me he quedado, curiosamente desconectado este pasado fin de semana intentando convencer a mis compis del ‘intené’ que esto de beber aceite de oliva virgen extra está muy bien, es muy sano y te alarga la vida más que aquel Matusalén que parece que nunca murió. Pero, sí, eso, llega. Con o sin aceite de oliva virgen extra. Pero si se bebe de ése que nos venden en supermercados y grandes superficies mezclados, refinados o vete tú a saber qué, moriremos antes. Haremos un bonito cadáver como aquel de Sex Pistols que lo decía y lo cumplió.

Menos mal que cada vez más personas se van dando cuenta de la estafa que a gran escala nos llevan metiendo en el cuerpo desde hace años. Pero que luego se sepa vender más o menos, será otra peli, más vinculada a mejores actores que a ‘atrezzos’.

Por eso liado como he estado con todo ello, ando muy desconectado del ruido politiquero que a mí me gusta – me poneeeee- y que suelo usar aquí para dejar en negro sobre blanco que, por ejemplo, qué narices hacen los bienpagaos de los sindis negociando mi futura pensioncilla. A esto señores jamás se les ha votado en unas elecciones generales. Por ejemplo. En mi nombre, no, gracias.

Pero como esto es predicar en el desierto tunecino y en casa, al tener casi un 30% de paro, le importa un huevo al personal, he pensado que yo también voy a empezar a pasar de todo. ¡Leña al mono! Y a vivir que son dos días. Total qué más dá. Nadie va a sacarnos de la miseria en la que estamos. Y de la que nos gusta disfrutar, por activa y por pasiva. Si no haces nada, porque no lo haces; si lo haces, porque no lo hagas que se te ve mucho y ya sabes, las sensibilidades están a flor de piel. O sea que debes conjugar la boca y el ojete para lo mismo: chupar o que te den. ¡Y un mojón! Para eso tiro por la calle de en medio y me las piro vampiro. Menudo monólogo interior.

Cutrez, cutrería, catetura y catetez. Dame otra ración de calamares que me voy pa Madrid, Pepe. No sé. Qué difícil es todo. Qué difícil es acertar. Qué difícil es ser profeta en tu tierra. Qué difícil es ser feliz en ella.

Nuestra sociedad se está muriendo. Pero no seré yo quien mire al moribundo más. Que arda por los cuatro costados y como el sol sale por Antequera, pues que no me esperen más que me suelo mear fuera del tiesto con evidente reiteración. Más monólogo interior. Uso puntos y comas para que no te ahogues leyéndome.

Por cierto, San Antón un exitazo. Pero cada vez es más complicado correr en ella con cierto perfil ‘de superación’. En esta edición, hasta la plaza de toros no pude hacerlo en condiciones. Lo que más me gustó fue cómo el ‘speaker’ la hacía la pelota a Carmen Purificación que oyéndolo, parecía que nos había parido a tod@s los que esperábamos el disparo de gracia. Algo más de 37 minutos entre antorchas, rosetas, palmas, lumbres y melenchones. Y los jaeninos tan felices. Por una noche se cambia el opio futbolístico por el atlético. Pan y circo. Y yo en medio del tinglado. Para que me coman los leones, Por eso corrí.

¡Corre, corre, corre que te comen!