Diario IDEAL, 24 abril 2013

Los que me conocen, me leen, me siguen y hasta fisgonean, por ejemplo, mi blog Vagamundos (www.fernandortega.com), sabrán de sobra mi pasión y perdición por los desnudos femeninos, mezcla del arte de la fotografía y la seducción de las curvas de una mujer, siempre ser para adorar hasta el día del juicio final. Por eso y por otras muchas razones, defendí desde el segundo uno, contra las críticas que recibió, la concejal socialista de Los Yébenes que, en uso de su libertad individual, compartió con su amante futbolista un vídeo en el que, desnuda, se masturbaba. Ella, dueña de su cuerpo y de sus relaciones, confió demasiado en su amante futbolista que, en un acto vil y carente de dignidad y hombría, filtró el vídeo para escarnio público de la edil del PSOE. En aquellos días hubo mucho ruido y fueron muchas mujeres de ambas tendencias partidarias, las que la defendieron, no sólo por la violación de su honor e intimidad, sino por lo que el acto de filtrar tenía de interesado, bastardo e inmoral.

Pero Olvido convirtió la polvareda en algo diferente. No sólo mostró artes de vedette en sus primeras declaraciones, sino que rápidamente, por su cuerpo bonito -ahora explicaré por qué-, se puso manos la obra para sacar tajada de la filtración. Nadie nunca oyó hablar de la actividad de Olvido como concejal del PSOE, ni supimos nunca cuál fue su aportación al bienestar de las mujeres de su pueblo o cuáles fueron sus propuestas intelectuales en las diferentes ordenanzas de su municipio. Ella rápidamente le cogió el gusto a la cámara y en pocas semanas dejaba el consistorio para pasarse a los reality de Tele 5. La concejal del PSOE, ahora ya ex concejal, decía que ‘me gusta probar cosas nuevas’ y se enroló en la cadena amiga para saltar con un bañador en el que se atisbaba un tattoo que escondía algo más que un ombligo. Porque, como algunos ya intuimos -y dijimos- en su día, al fichar por Tele 5, la ex concejal socialista, se quedaba con todas las cartas para ser un día, no muy lejano, portada y estrella invitada de interviú.

La historia de la revista nos dice que la citada cadena es un nicho-semillero de portadas, con más o menos proyección mediática. Belén Esteban, por ejemplo, lo hizo en varias ocasiones. Por no hablar de las grandes hermanas… casi todas han posado en bolas en la revista. Y bien que nos alegramos. O la mismísima concejal del PP de Lepe, María Dolores Jiménez que tentaba a hacer lo propio a Esperanza Aguirre un 19 de abril de 2007 cuando afirmaba que ‘me encantaría posar desnuda como la concejal de Lepe’.

Pero Olvido ha sacado pecho y, ni corta ni perezosa, se ha despelotado ‘por venganza’ contra el futbolista, y afirma querer dejar las cosas en su sitio. Las palabras de Olvido la colocan en un pútrido lugar, sobre todo cuando afirma que ‘si fuera gorda y fea no se habría montado la que se montó’ autoconfirmándose como la reina de la belleza toledana, desmereciendo a sus vecinas subidas de kilos y evidenciando, entonces, que el PSOE la llamó a ser concejal, no por su altura intelectual, sino porque, simplemente, estaba buena, es decir, delgada y guapa. Chapó por interviú.

Hay que ser inane moral para perder todos los argumentos como los ha perdido esta señora de Los Yébenes, que ha puesto su progresismo al servicio del parné, haciendo buena incluso a Bibiana Aído que, lejos de volver a Barbate o La Habana, se agenció un currito en Nueva York, cuna del capitalismo más asqueroso -contra el que despotricaba-, sin que le temblara su voz.

Olvido ha criticado a sus críticos, gallardeándose de ‘liberal’. Pardiez que esta chica no tiene ni zorra idea de lo que es ser liberal. No sé qué pensarán sus compañeras de partido que tachan de machistas a revistas como interviú, pero con ella han guardado un sectario silencio, como lo guardan las vigilantas del talibanismo feminista, amantes de esa belleza estalinista que pretende que las mujeres orinen de pie, calcen botas y se afeiten el cogote, que no les ha molestado que su compañera se haya jactado de ser ‘rubia, guapa y delgada’, y aprovechar su cuerpo desnudo para vengarse de su amante futbolista. María Patiño, sin embargo, ha hablado alto y claro.

Francamente Olvido, conozco a muchas mujeres que se vengarían de sus amantes futbolistas sin necesidad de despelotarse (Corinna lo ha hecho enseñando diamantes), aprovechando que tiran dos tetas más que dos carretas y llenarte la faltriquera de pasta, importándote una mierda tu progresismo, para pasar a renglón seguido, a presumir de ‘liberal’.

Querida has seguido el mismo camino de otras criaturas que, por acción o por omisión intelectual, (ya vamos por 14 ediciones de Gran Hermano), se despelotan para cornear a sus cornudas parejas. Pero tú podrías haber seguido un camino mucho más inteligente llamando a Hefner desde Ferraz, y con una rosa puñetera en tu pubis depilado, haber convencido al magnate del conejito para ser la verdadera imagen de una España desnuda por los recortes peperos: portada en Playboy. Lástima que tus ganas de venganza se hayan quedado, como todo tu compromiso ideológico, en un ingreso de un cheque en tu cuenta bancaria.

Los grandes desnudos se hacen por arte, por amor, por borracheras, o incluso por venganza, como lo hizo Madonna contra Sean Penn. Pero ella publicó un libro llamado ‘SEX’, donde se desnudó de verdad. Hoy es un oscuro objeto de deseo de cualquier coleccionista.

Tu desnudo, Olvido, sin embargo, pasará al olvido. Como tu futbolista.