Piedras. Inertes. Contempladoras.

Suman pasos. Restan días. Multiplican las ganas de contar y dividen las fuerzas cuando las arrastras como un Sísifo terráqueo.

Stones. Rolling? ¿O era sólo una y rodante? Tras un concierto. Conejos de colores que salen de la chistera que, como una piedra, es oscura, redonda y llena de sorpresas.

¿Has pensado alguna vez en preñar un saco con piedras redondas y lanzarlas, una al una, al mar?

Cuenta las ondas que dejan. Un día ya que no querrás dejar de hacerlo.

Contar ondas. Contar piedras.

Redondas. Stones. Rolling?