Dic
14
2009Could you be loved?
Arrastrada entre un mar de sábanas, casi ahogada por el algodón, respiras entre mis manos. El buzón se quedó abierto y tú, ligera como siempre, dejaste el calor de tus dedos en su interior. Días de vino y rosas; vasos rotos con los que cortarnos los labios para luego bebernos la sangre, etílicamente repleta de besos. Algodón, alcohol, besos. Unas sábanas que ahora, yermas, huérfanas, se tiñen de vino tinto. Es el color etílico -otra vez- de mi sangre, la sangre que emana de mis muñecas. Un grifo de barril abortado.
Comentarios recientes