Cuando se ejerce de lo que se es

¿Ser o estar? Si estás es porque eres y si eres estás. Por tanto hay que saber lo que se es para poder estar y, en su caso, ser lo que se es.

Bitácora de un "vagamundos"

Lunes: Amanece en el Santo Reino. En escaso tiempo, las entrañas de la Plza de La Merced de Málaga nos regala un buen puñado de kilos de calor mediterráneo.

Comida vegetariana con el "pater familias".

El atardercer pinta de naranja las lomas de Sierra Mágina, en el regreso.

Martes: "Llora como mujer lo que no pudiste defender como hombre". Amanezco en los Jardines del Triunfo de Granada. Soy recibido por el Teniente Coronel Ruiz que me presenta al General Martínez Isidoro. Un placer.

Comida frugal en la capital del Santo Reino.

La noche extiende su manto sobre las puertas de Andalucía, Ciando me asomos de nuevo al mediterráneo en Málaga, la oscuridad y su burbuja negra, se lo ha tragado todo.

Miércoles: "A quien madruga Dios le ayuda". Son las 6 de la mañana. Veo como aparece el sol desde la ventanilla del avión. Las nuebes cubren la Ciudad Condal.

Desayuno con diamantes. Los amigos lo son. Trabajo.

Retorno urgente. Todavía es media tarde en Málaga. Té reparador. La noche me susurra en el oído a las puertas del Castillo de Santa Catalina. Cena y sofá reparadores.

¿Ser o estar? Aún no lo sé.