Diario IDEAL, 16 octubre 2013

No voy a descubrir nada nuevo manifestando, una vez más, mi asco por la clase política española en sus variantes territoriales, sindicales y demás estructurillas de poder. Pero como soy un ser irrelevante, me llevé un enorme sorpresón cuando una revista del prestigio de ‘Esquire’, este mes de octubre, la carta firmada por su director Andrés Rodríguez, reivindica su pasión por la ‘Política’ -coincidimos-, y la necesaria desaparición en los medios de nuestros ‘políticos’ en aras de devolver el protagonismo a los que verdaderamente son los indiscutibles titulares de los partidos que se juegan a diario en los diferentes terrenos de juego de nuestro país: los ciudadanos. El habla de los ‘como tú y yo’. Yo me conformaría, incluso, con menos. Pero su órdago a que la prensa española en cualquiera de sus manifestaciones (escrita, radio y/o tv), hiciera caso de ello, me temo que será inútil. Aquí la prensa está al servicio de las ideologías partidarias que todo lo pudren cuando lo tocan. Un ejemplo: somos el primer país del mundo en televisiones públicas. Esto es un dato tan demoledor que no merece apuntar nada más. Dar protagonismo la sociedad civil es algo que está prohibido en España y en los grandes medios. La izquierda estalinista arrea contra la derecha cavernaria, y los