Mi cascarón de nuez

Hace mucho, mucho, tiempo que ando, como dice la estrofa ubetense de su creador, navegando sobre un cascarón de nuez en s u s "Peces de ciudad"

Aún no llevo los tatuajes bucaneros…sin embargo me he cruzado con piratas y corsarios con "patente de corso" que han dejado sus muescas sobre la frágil estructura de mi portador cóncavo…sí, como las naves de Odiseo, como esa nave que Tánger Soto usa para engañar a Coy, pirata sin barco del nuevo siglo.

Sus proas manchadas de petróleo han intentado que mi débil nave embarranque, como sus enormes cascos, en medio de la ciudad…pero mi timón sigue con su rumbo puesto en ella…en ese lugar en el que ya nadie desarmará el vaho de los cristales o me preguntará si mi Visa es de color azul, dorada o negra.

Allí, en ella, fondearé mi corazón y sólo navegaré el día en que su sangre sea bebida de mi salvación.