Dic
07
2006MIs botas
Ayer elegí subirme a un par de botas casi de siete leguas;
leguas que me llevarán a la ciudad bañada por los dos ríos que
nacen de las cuencas de tu ojos…
Dos botas, dos ríos, dos ojos… quiero dos vidas:
una, para vivir contigo y otra, para revivir lo que no viví en la primera vida.
Dos vidas multiplicadas por dos palabras igual a cuatro letras.
Ayer me acordé que con mis botas las leguas que nos separan, no existen.
Mis botas, tan lejos, tan cerca, siempre me llevan a ti.
Y sin embargo, cuando miré al suelo, ellas no se habían movido.
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