May
30
2006Modernidad
Como un combate de caballeros sin armadura, llega Modernidad pisoteando las almas de los salvajes que necesitan tomar su dosis de soma en las caravanas de puntos rojos y tragar un poco de monóxido de carbono, para que sus corazones latan al mismo ritmo cada atascado día. Los mares asfálticos sólo crean olas de humo y las luciérnagas murieron asfixiadas por los tubos de escape. Modernidad, cárcel de oro.
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