¿Te has acercado?

Esta noche te has acercado como te recordaba…  comprimiendo mi alma con el tintineo que dejan en el aire las letras que te definen como lo intangible…

Has sido el sueño de una lata de cartón, de un calor crematorio, de un grifo que no para de arrojar gotas de sudor…

Esta noche te has sentado en el borde de mis ojos para mirarme desde los tuyos y sin embargo ¡hace tanto que no te veo! 

La noche, vieja conocida, sigue siendo navegante con patente de coros al mejor postor.

Esta noche me acerqué a tí porque quería, sólo, besarte.