Todo negro

Cada vez que me levanto lo veo todo negro… mi bandera es negra y hasta mis pulmones están encharcados de una marea negra, oscura como la noche del cadalso.

Todo es negro a mi alrededor… mis sábanas, mortecinas, respiran el negro de su color; el espejo rebota un reflejo tan negro que la mirada se pierde en él. 

Negro es el color del día, de mi día, de ese día que a todos llega sin avisar; negro por negro es negro al cuadrado y todo los cuadros de mi habitación negra, son negros. Negritud decorativa.

Y millones de negros se desangran en el corazón del continente negro. O mejor, mueren en el agua azul que se vuelve negra con su sangre y las mentiras negras de nuestros políticos rojos que en realidad son negreros, por capitalistas, sátrapas y esclavistas.

¿Es negra la libertad?

El que la quiere, bien negro lo tiene.