Tragedia

Leo el blog de Juan Varela, una de las personas clave en esto de la blogalaxia -me gusta más que el término blogosfera- su post titulado El fin de la inocencia. Allí habla de la libertad que teníamos -habla de un pasado glorioso- en Internet y las amenazas que van llegando. Excelente y sobre todo: ¡trágico!

Los escritores clásicos, sus tragedias y mitos, viven aún entre nosotros -aunque ya a muchos estudiantes les hayan cercenado parte de su libertad comenzando por su formación- .

Pero Juan no habla de Medea, Edipo, Orestes o Antígona.

Juan habla de que  «la Declaración de Independencia del Ciberespacio se quiebra. Llega el fin de la inocencia. Una regla de oro regía el ciberespacio: ‘Trata a los demás como te gustaría ser tratado’. Pero el negocio, la ambición y el poder la rasgan. ‘El espacio social global será independiente de las tiranías que buscáis imponer’. (…) Pero cuando llega el dinero, la política viene detrás y las viejas leyes de propiedad acaban con la liberalidad del intercambio. Políticos, medios, dueños de la tecnología y nuevos negocios chocan. Los usuarios y la libertad pagarán si muere la independencia del ciberespacio».

Aristófanes, Esquilo, Sófocles o Eurípides se habrían atrevido de igual manera a retratar  la  poderosa  -corrupta y deshonesta- ambición del dinero y todos sus coreutas por dominar nuestra libertad.

Sin duda, trágico.

*******************************

¿Te apetece leer y votar el relato Desde anoche?

*********************************