Un reloj de arena

Como si el tiempo estuviese formado por minúsculos granos de arena…

como si nuestros cuerpos sólo fueran millones de gotas de agua…

como si nuestros ojos fueran miles de cabezas de alfileres…

o como si nuestras manos fueran millones de líneas digitales que cruzan el umbral de lo intangible a través de la Red, es como yo, ahora, en esta fracción de segundo que es, te recuerdo… 

Y te recuerdo en el momento en que mi amnesia se volvió blanca, como blanca es la espina que atraviese mi columna vertebral y me hace doblarme como el papel en busca de una firma que autentifique mi partida de nacimiento, mi depósito sin interés o el pasajero deseo de volver a recordarte.